
En un ambiente de recogimiento y alegría, celebramos la Eucaristía de Pascua junto a nuestros estudiantes, padres de familia, docentes y personal administrativo, el acontecimiento central de nuestra fe cristiana. Esta celebración litúrgica nos reunió como comunidad educativa para proclamar con alegría que Cristo ha resucitado. Fue un momento profundamente espiritual, en el que recordamos la victoria de Jesús sobre la muerte y el llamado a vivir con esperanza y una fe renovada, y vive entre nosotros.
La celebración estuvo llena de signos vivos: cantos, lecturas y gestos que nos conectaron con el mensaje central de la Pascua: la vida nueva que brota del amor y del perdón.
Durante la homilía y las oraciones, resonaron con fuerza las palabras del Papa Francisco, quien nos invita a ser “misioneros de esperanza” en medio de un mundo herido y dividido.
Esta Eucaristía nos recordó que todos estamos llamados a ser luz en nuestro entorno, a construir la paz y a vivir con la alegría del Evangelio. Una experiencia significativa en la que pudimos sentir viva la presencia de Cristo Resucitado entre nosotros.
Escrito por
Karen Isabel Padilla de La Cruz
Equipo de pastoral